A nivel mundial los aceites se dividen en:

GRUPOS I, II y III Aceites minerales derivados del petróleo parafinicos y naftenicos de diferentes calidades.
GRUPO IV Aceites sintéticos PAO Polialfaolefinas
GRUPO V Aceites sintéticos varios, a saber: PAG Poli-Alkilen-Glicol, D Diester, Silicona, etc.

Todos los aceites tienen una Viscosidad estandarizada a 40ºC que es conocida como viscosidad ISO (International Standard Organization) esta viscosidad no tiene nada que ver con la calidad del lubricante, en cambio el Índice de Viscosidad  o  Viscosity Index VI, que es la variación de la viscosidad con el cambio de temperatura, si tiene que ver con la calidad del aceite. Entre mejor es el aceite menos se adelgaza con la temperatura, esto brinda una protección adicional a la maquinaria a su temperatura normal de operación, que en algunos micro puntos al trabajar el metal con metal puede llegar a varios cientos de grados centígrados. Si queremos calificar un lubricante por medio del tacto o “dedometro”, nunca vamos a tener idea de cómo va a trabajar dentro de la maquinaria en uso.
Normalmente los lubricantes sintéticos tienen un índice de viscosidad más alto que los aceites minerales, aunque hay aceites del grupo III que mediante modernos aditivos pueden incrementar mucho su VI al grado que algunos fabricantes los etiquetan como sintéticos, la desventaja de estos aceites mejorados (enhanced) es que no conservan su VI mejorado durante toda la vida útil del lubricante, solamente lo hacen por 3 o 4 meses y después hasta pueden provocar fallas a equipos críticos en sistemas cerrados como cajas de engranes o compresores .
La protección adicional que brinda un lubricante sintético por tener mayor capacidad de carga, mayor resistencia a la temperatura, mayor protección contra la corrosión y en general mayor disminución del desgaste del equipo nos da como resultado: la eliminación de paros no programados del equipo, disminución de los costos de mantenimiento e incremento de productividad y confiabilidad de la maquinaria, que curiosamente es la misión de Tribology de México.

TTL ofrece la máxima protección contra fricción y desgaste en sus equipos, lo que disminuye los costos de operación e incrementa la confiabilidad de su maquinaria industrial.